LA PANDEMIA DEL MIEDO: acerca del mainstream y otros demonios
1 de diciembre de 2020
En ocasión del día del farmacéutico venezolano
"Es más fácil engañar a la gente que hacerla entender que está siendo engañada"
Mark Twain
El año 2020 colocó sobre el tablero mundial una de las mayores crisis sanitarias de todos los tiempos, conocida como la pandemia del virus denominado SARS-COV-2, causante de la enfermedad llamada “COVID-19”. Como parte de una escalada de eventos sanitarios con inicio a finales de 2019 en Wuhan, China, 2020 arrancó con una serie de medidas tomadas por diversos países, tales como el cierre de fronteras, confinamientos colectivos, aplazamiento de eventos públicos, entre otras. En marzo la Organización Mundial de la Salud (OMS) declara pandemia al COVID-19 y la bola de nieve del miedo empezó a rodar en prácticamente todas partes.
El fenómeno “pandemia COVID-19” quizás pase a la historia como uno de los acontecimientos más sui generis de todos los tiempos, debido, entre otras cosas, a las correlaciones múltiples entre un gran número de variables, desde el ámbito científico al geopolítico, pasando por el financiero, sanitario y sociológico, lo cual obliga, de un modo u otro, a procesar una gran cantidad de información de diversa índole en períodos de tiempo muy reducidos. Difícilmente alguien posea los conocimientos necesarios en todas las áreas como para comprender suficientemente este fenómeno. Sin embargo, lo realmente preocupante no es la incomprensión en sí misma, sino algo mucho más peligroso: el miedo. Pero no el miedo orgánico, de protección ante peligros básicos como por ejemplo a las alturas, sino el miedo irracional y ciego, producto de una actitud irreflexiva y negligente y que nos conduce a la credulidad y a la reactividad, convirtiéndonos en marionetas de las circunstancias y personajes característicos de una realidad distópica. Mientras se desarrollan los acontecimientos se han ido generando cantidades crecientes de información y saturando en gran parte los espacios informativos, haciendo prácticamente imposible seguirles la pista y mucho menos analizarlas debidamente. Y no se trata de un escándalo político o del estallido de un conflicto armado en medio oriente o inclusive de un colapso financiero, noticias todas ellas, en mayor o menor modo, inteligibles para la mayoría de nosotros y por lo tanto “digeribles” hasta cierto punto. En esta ocasión se trata de un evento totalmente inesperado por el gran público e incomprensible desde una óptica sencilla. Diversas voces hablan de “genoma”, “nucleótidos”, “reacción en cadena de la polimerasa “(PCR, por sus siglas en inglés), “retrovirus” y un largo etcétera que supone un reto importante para el no versado. Y por si fuera poco, muchas de estas noticias se contradicen entre sí. Por otra parte, la velocidad de respuesta de los sistemas sanitarios, como es esperable, ha estado muy por debajo de la velocidad de propagación de los contagios o supuestos contagios. Sin embargo al observar con mayor detenimiento vemos que la velocidad de propagación de los contenidos informativos, y desinformativos, es muy superior a la de los mencionados contagios. La velocidad de “viralización” de una noticia, falaz o no, puede llegar a ser asombrosamente superior a la de un virus biológico propiamente dicho, por dos motivos fundamentales: en primer lugar la transmisión de una noticia hoy en día se produce virtualmente a la velocidad de la luz, la cual es muy superior a la velocidad con la que puede transmitirse un virus biológico durante el proceso de infección; el segundo motivo es que la relación numérica del contagio de un virus biológico generalmente sigue un patrón de 1 a 1 por cada evento de transmisión (contacto físico, estornudo, etc.), en cambio en el caso de las noticias dicho patrón es de 1 a muchos; es decir, en cada evento de transmisión, por ejemplo un click en Facebook, la noticia podría difundirse simultáneamente a cientos, miles o inclusive millones de personas en un solo instante. Un caso de ello lo vimos cuando el pasado 14 de marzo Olivier Véran, neurólogo y ministro de solidaridad y salud de Francia publicó en su cuenta de Twitter que el uso del ibuprofeno podría agravar el cuadro de infección por COVID-19, comprobándose tiempo después la inexactitud de tal afirmación, no sin antes haberle dado la vuelta al mundo. Una vorágine de opiniones y declaraciones de todo tipo proliferan en los diarios y noticieros, siendo muy difícil para cualquiera verificar su veracidad. Sin embargo existe un evidente contraste entre la propuesta del “main stream” informativo por parte de los medios de comunicación más conocidos y posicionados así como de instituciones de referencia mundial en la materia, tales como la OMS, o la Federal and Drug Administration (FDA), entre otras, y en la otra esquina del cuadrilátero encontramos algunas personas del mundo científico y de la salud que plantean interrogantes cuyas respuestas aún se desconocen. La postura del main stream es ampliamente conocida por cualquiera que tenga un televisor encendido más de cinco minutos al día, no obstante, este segundo grupo, en la gran mayoría de los casos, se manifiesta a través de canales informativos auxiliares o alternativos, que no gozan del poder mediático de los abanderados del main stream. Así oímos voces como la de los doctores Pablo Goldschmidt, Judy Mikovits, Roxana Bruno, Theresa Deisher, Johan Giesecke, María José Martínez Albarracín, entre otros, mayor o menormente conocidos, así como de excelentes comunicadores haciendo su mejor esfuerzo para divulgar cosas que de otro modo quizás permanecerían ocultas. De este modo vemos cosas como:
- Que la referencia más influyente usada como base para justificar la medida sanitaria de confinamiento masivo en el Reino Unido fue una publicación realizada por el epidemiólogo y miembro del equipo de respuesta del Imperial College London, Neil Ferguson, quien tiene fama de haberse equivocado en varias ocasiones sobre predicciones de mortalidad basadas en modelos matemáticos errados (Rushton y Foggo, 2020). El virólogo argentino Pablo Goldschmidt, en una entrevista el pasado 9 de abril, refiere que dicha publicación fue aceptada por los peritos de la OMS sin la debida comprobación;
- Que para las primeras pruebas para el SARS-COV-2 se usaron cebadores diseñados a partir de fragmentos de material genético, tomados de bancos de genes del virus SARS-COV-1 del año 2003, antes de la publicación del genoma del virus SARS-COV-2 del año 2019 (Corman y colaboradores, 2020);
- Que según declaraciones independientes de las doctoras Roxana Bruno de Argentina y María José Martínez Albarracín de España, no se hicieron los aislamientos de las partículas virales intactas, tal como lo establecen los postulados de Koch, ya que una cosa es extraer el material genético de muestras biológicas y otra es hacer el aislamiento de las partículas virales intactas para estudiar su viabilidad y potencial patogénico de acuerdo a dichos postulados. Comenta Bruno que en los procedimientos señalados en las primeras publicaciones realizadas por científicos chinos en enero de 2020, donde se reporta haber identificado el nuevo agente de éstas neumonías bilaterales atípicas, no se refleja que se hayan seguido dichos postulados; sólo se aislaron las muestras y se obtuvo el material genético contenido en ellas para su secuenciación. El problema, indica, es que dicha secuenciación no es específica para un solo genoma, por lo tanto en los resultados se obtendrían genomas, no sólo del virus objeto de estudio sino también de otros organismos, como por ejemplo del mismo paciente, así como de otros virus y bacterias. Se sabe que tardíamente se llegaron a hacer algunos aislamientos, pero lo que denuncia Bruno es que no se han seguido los postulados de Koch, los cuales son necesarios para establecer inequívocamente la etiopatogenia del COVID-19 frente al SARS-COV-2, ya que, según explica, las neumonías pueden ser causadas por una gran cantidad de microorganismos, entre los cuales figuran diferentes tipos de virus, entre ellos los de la familia coronavirus;
- Que las medidas de restricción y confinamiento social fueron tomadas sin contar con pruebas validadas para este virus (Klement y Bandyopadhyay, 2020);
- Que, según abundantes publicaciones, el pronóstico de la prueba de anticuerpos para COVID-19 es muy diferente si se trata de un resultado positivo para inmunoglobulinas tipo IgG versus inmunoglobulinas tipo IgM, ya que, a diferencia de las segundas, las primeras sugieren la superación exitosa de la infección por parte del sistema inmunológico del paciente y la pérdida de la contagiosidad a otras personas;
- Que a pesar de las alertas de la OMS, la FDA, entre otras, en contra del uso del dióxido de cloro, desde hace mucho tiempo hay evidencia científica, debidamente documentada, que sugiere su uso como un potente coadyuvante para combatir la infección por patógenos (véanse publicaciones de Ogata y Shibata, o de Noszticzius y colaboradores, entre otras);
- Que los testimonios directos de varios médicos, entre ellos los de la doctora María Eugenia Barrientos de Honduras, que con base en sus experiencias directas en gran cantidad de pacientes, determinó que en las primeras etapas de infección por SARS-COV-2, es muy efectivo el tratamiento con terapia antigripal y antiinflamatoria con ibuprofeno;
- Que la "inmunidad de grupo o rebaño", podría jugar un papel clave en la superación de la enfermedad en una población y que el confinamiento masivo podría entorpecer, y por lo tanto resultar contraproducente;
- Que la mayoría de las muertes adjudicadas al SARS-COV-2 ocurren en pacientes con co-morbilidades o condiciones de salud deficientes;
- Que el costo humano de un mal manejo de esta situación se traduce en millones de puestos de trabajo perdidos, miles de negocios idos a la quiebra, incontable número de pacientes con otras enfermedades graves que al no haber sido atendidos oportunamente, debido a esta "pandemia", perdieron la vida o empeoraron su estado, separación de familias, entre otros.
- Cuando las cifras de fallecimientos por COVID-19 son comparativamente bajas en relación a otras enfermedades y además, por las razones anteriormente expuestas, los números no son confiables?
- Cuando existen incontables testimonios de recuperación de pacientes mediante tratamiento convencional con terapia antigripal y antiinflamatoria o con el mismo dióxido de cloro?
- Cuando sabiendo de manera pública y notoria, que el desarrollo y puesta en el mercado de una nueva vacuna, típicamente puede tomar más de diez años y que además la FDA permitirá la distribución de la vacuna contra el SARS-COV-2 sin la debida licencia o aprobación, con el enorme riesgo que todo esto conlleva?
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Fuentes de referencia
“No se puede seguir siendo víctima de una presión internacional por cosas mal hechas”
Entrevista al virólogo argentino Pablo Goldschmidt en el canal de YouTube “Radio La Red AM 910”. 9 de abril de 2020.
La emergencia viral y el mundo de mañana
Byung-Chul Han. 22 de marzo de 2020.
Mikovits, J. PhD and Heckenlively, K. JD.
“Plague of Corruption”. Skyhorse Publishing. 2020.
C0VID -19 LO QUE LOS MEDIOS OCULTAN
Entrevista a la Dra. María José Martínez Albarracín por el periodista Jorg Metzger Lozano en el canal de YouTube “Prensa sin mordaza”. 13 de agosto de 2020.
La doctora María José Martínez Albarracín, es licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Murcia y catedrática de Procesos Diagnósticos Clínicos, psicoterapeuta formada por las escuelas madrileña y murciana de terapia gestalt. Ha sido profesora de Bioquímica, Inmunología y Técnicas Analíticas Instrumentales en el Ciclo Superior de Formación Profesional de “Laboratorio de Diagnóstico Clínico”.
Entrevista a la Dra. Roxana Bruno. Inmunóloga. Covid-19, cuare-terna y vacunas
Entrevista a la Dra. Roxana Bruno, por el Padre Javier Olivera Ravasi en el canal de YouTube “QNTLC”. 19 de agosto de 2020.
La doctora Roxana Bruno posee un doctorado en bioquímica inmunológica, fue médica residente del hospital Central de Mendoza, Argentina. Es doctora en inmunología por la Universidad Autónoma de Barcelona, España y ex investigadora del Instituto Max Planck de Neurobiología de Munich, Alemania. Ha sido investigadora del Instituto de Neurociencias de Alicante, España.
How Pfizer's RNA Vaccine Works
Berezow, A. PhD. American Council on Science and Health. 21 de octubre de 2020.
https://www.acsh.org/news/2020/10/21/how-pfizers-rna-vaccine-works-15104
COVID-19: Federal Efforts Accelerate Vaccine and Therapeutic Development, but More Transparency Needed on Emergency Use Authorizations
U. S. Government Accountability Office. GAO-21-207. 17 de noviembre de 2020.
https://www.gao.gov/mobile/products/GAO-21-207
COVID-19 CORONAVIRUS PANDEMIC
Worldometer
https://www.worldometers.info/coronavirus/
Neil Ferguson, the scientist who convinced Boris Johnson of UK coronavirus lockdown, criticised in past for flawed research
Rushton, K., Foggo D. The Telegraph. March 28, 2020
“So the real scandal is: Why did anyone ever listen to this guy?”
Andrew. Columbia University. Statistical Modeling, Causal Inference, and Social Science. 8 de mayo de 2020.
Report 9: Impact of non-pharmaceutical interventions (NPIs) to reduce COVID19 mortality and healthcare demand
Ferguson, N. y colaboradores. Imperial College London. 16 de marzo de 2020.
https://doi.org/10.25561/77482
SARS-CoV-2 Testing: Trials and Tribulations
Babiker, A. MD., y colaboradores. American Journal of Clinical Pathology, Volume 153. 6 de junio de 2020. Páginas 706–708.
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The epistemology of a positive SARS-CoV-2 test
Klement, Rainer & Bandyopadhyay, Prasanta. Acta Biotheoretica. 2020.
https://doi.org/10.1007/s10441-020-09393-w
Detection of 2019 novel coronavirus (2019-nCoV) by real-time RT-PCR
Corman y colaboradores. Euro Surveill. 2020;25(3):pii=2000045.
https://doi.org/10.2807/1560-7917.ES.2020.25.3.2000045
Chlorine Dioxide Is a Size-Selective Antimicrobial Agent
Noszticzius y colaboradores. (2013) Chlorine Dioxide Is a Size-Selective Antimicrobial Agent.
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https://doi.org/10.1371/journal.pone.0079157
Protective effect of low-concentration chlorine dioxide gas against influenza A virus infection
Ogata, N., Shibata, T. J Gen Virol. 2008 Jan;89(Pt 1):60-67. doi: 10.1099/vir.0.83393-0.
PMID: 18089729 DOI: 10.1099/vir.0.83393-0
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/18089729/
El miedo como mecanismo de control social: hacia una filosofía de la seguridad
Rojas Alarcón, L. Universidad de La Salle. 2016.
https://ciencia.lasalle.edu.co/filosofia_letras/67
Pneumonia. Our World in Data
Bernardeta Dadonaite, Max Roser. Global Change Data Lab. 2019.
https://ourworldindata.org/pneumonia
Test de coronavirus: los científicos que crearon una prueba de diagnóstico "casera" para detectar covid-19
Mackenzie, Nell. BBC News Mundo. 23 de abril de 2020.
Comentarios
Lamentablemente, cuántos somos los que leemos estos artículos, los entendemos y sabemos, que la vacuna es contra el miedo.
Y que, con el hambre y el miedo, a través de los tiempos se ha controlado a la humanidad. Lo lamentable es saber, y no todos lo saben que hay grupos que desean y sueñan con el poder de controlar a las masas y la humanidad en general.
Es por eso que como Filántropo por naturaleza, me dedico a elevar el nivel de consciencia de la gente para que pueda discernir y tomar su propia decisión. No dejarse manipular por el Miedo. Diferenciar entre la verdad y la charlatanería.
Dra. Mariela R. Parilli
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